Te ha pasado alguna vez? Discutes con alguien y, aunque uno por uno desmontas lógicamente todos sus argumentos, continúa actuando como si siguieran intactos. Los incompetentes son incapaces de darse cuenta de su incompetencia, así que la próxima vez que te encuentres a alguien contradiciéndose a sí mismo, pero juzgándote a tí, solamente dile dos palabras: Dunning-Kruger.
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